• 7 de marzo de 2022
  • juan cruz
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Alina Kabáyeva, la excampeona mundial de gimnasia, después de muchos años vuelve a acaparar las cámaras de los paparazzis rusos, pero esta vez no es por una hazaña rítmica como las que hizo cuando tenía 13 años, se trata de un supuesto romance con el presidente ruso Vladímir Putin.

Aunque el Kremlin se resiste a confirmar su noviazgo, la prensa rusa no duda que el presidente comparte su vida desde hace décadas con Alina, madre de sus hijos pequeños, dos niñas gemelas que nacieron cerca de Lugano Suiza en febrero de 2015.

De acuerdo con el diario The Sun, tras el conflicto con Ucrania, Vladímir habría escondido a su novia y a sus cuatro hijos pequeños en un chalet de Suiza, mientras lleva a cabo su asalto, atacando a familias inocentes y provocando una crisis de refugiados.

¿Quién es Alina Kabáyeva?

Alina Kavaeva (o Kabayeva) nació en 1983 en Taskent, capital del actual Uzbekistan y, entonces, perteneciente a la Unión Soviética. Hija de futbolista, su infancia la vivió a merced de la profesión de su padre, viajando por diferentes países hasta que se instalaron definitivamente en Rusia, donde comenzó a entrenar gimnasia rítmica a un nivel altísimo con Irina Víner, que llegó a decir de ella que «tenía una rara combinación de dos cualidades cruciales en la gimnasia rítmica: flexibilidad y agilidad.

La gimnasta debutó internacionalmente a los 13 años y a los 15 ganó sus primeros europeos representando a la madre Rusia (título que revalidó al año siguiente, en 1996). Durante su carrera, que terminó en 2004, Alina Kavaeva consiguió 14 medallas del Campeonato del Mundo y 25 medallas del Campeonato de Europa, dos medallas olímpicas, una de ella de oro en Sidney 2000, y un gran escándalo: en los Goodwill Games de 2001 (Brisbane, Australia) dio positivo en furosemida, un diurético prohibido, y se le retiró el oro, además de anularse sus resultados del Campeonato Mundial de Madrid, que se había celebrado poco antes.

 

La exgimnasta y el presidente se habrían conocido en 2001, cuando él aún estaba casado con su exmujer, madre de sus dos hijas mayores y única pareja reconocida, Ludmila Shkrébneva. Aunque no se divorció oficialmente hasta 2014, parece que su relación con la Alina podría haber comenzado en 2007 o 2008, aunque no se habrían ido a vivir juntos hasta 2015 cuando, dicen, se mudaron a una lujosa zona residencial a las afueras de Moscú.