Hasta que se quemaron dos camiones de transporte público en las últimas semanas, el Instituto de Movilidad y Desarrollo Urbano (IMDUT) de Yucatán, a cargo del gobierno de Mauricio Vila, retiró 15 unidades por incumplir los estándares de calidad para presentar el servicio a la ciudadanía.

Como parte de su labor permanente de vigilancia y revisión de las condiciones con que se presta el servicio de transporte público urbano, la dependencia estatal sacó de circulación a esta cantidad de camiones, que circulaban en pésimas condiciones, representando un riesgo para sus usuarios.

En la supervisión, que comenzó desde el pasado 20 de enero, tras el incendio de dos autobuses en Mérida, también se prohibió la circulación de seis unidades, que fueron enviadas al corralón en tanto no reciban el mantenimiento adecuado.

Como resultado de esta revisión al transporte público, se encontraron diversas fallas en los 15 autobuses retirados, pertenecientes a las empresas Transportes Modernos S. A. de C. V., Minis 2000, Líneas Urbe, Unión de Camioneros de Yucatán y Camioneros Aliados.

Las unidades de las rutas Montes de Amé-Gran Plaza, Dzityá, Umán-Mérida, 69 Poniente y Kanasín Rojo, presentaron falta de luces delanteras, defensas, fascias y guardalodos deteriorados o inexistentes, panorámicos rotos o astillados, así como pisos, puertas, ventanas y asientos.

También fueron remitidas al corralón seis unidades que corresponden a las rutas Cardenales, Piedra de Agua, Reforma, Vergel 4, Chuburná 21 y Montes de Amé – Gran Plaza, de las compañías Micro Servicios Urbanos, Guzmán Salazar, Línea Camionera del Alba, Camioneros Aliados, Minis 2000 y Transportes Modernos S. A. de C. V., respectivamente.