Con baja afluencia se realizó este lunes el regreso a clases presenciales en Yucatán, pues debido a las bajas temperaturas y el incremento en contagios por COVID -19 de la variante ómicron, en la mayor parte de las escuelas hubo poca presencia de alumnos.

A pesar de la creciente cuarta ola de COVID, el Gobierno del Estado, a través de la Secretaría General del Educación de Yucatán (Segey) acordaron el regreso a las aulas de manera voluntaria este lunes 17 de enero; sin embargo, pocos alumnos fueron los que asistieron a los planteles educativos, ya que los padres de familia decidieron no enviar a sus hijos.

El regreso a clases presenciales se realizó a pesar de que en la semana pasada el Sindicato de Trabajadores Trasferidos de la Educación solicitara a Liborio Vidal Aguilar, titular de la Segey, que ésta decisión fuera reconsiderada, pues el traslado a los centros de trabajo y la falta de insumos en varias escuelas del estado para la adecuada protección de los alumnos y personal docente hacían el regreso a clases complicado.

De igual manera, el Colegio de Médicos de Yucatán solicitó a las autoridades estatales el cambio a Semáforo Epidemiológico a color rojo, ante la creciente ola de contagios en el estado; situación a la que también hizo caso omiso el gobierno encabezado por Mauricio Vila.

El día de ayer, el estado de nuevo volvió romper el récord de nuevos contagios, pues sumó 632 casos y con todo y eso, el regreso a las aulas no fue suspendido.